domingo, 27 de abril de 2008

Recuerdos Bizarros de domingo

De todos estos años de parranda, me gustaría decir: ¡¡Y ahora, que empiece la verdadera fiesta!!


Hace 10 años, por ejemplo, andaba inmiscuido en un proyecto un tanto efímero llamado Ediciones Mundo Bizarro –concebido siempre al lado de Casa Bizarra, un colectivo de artistas de “posguerra” trabajando en pro de cualquier cosa que fuése pro-pugna-reflexión-artística–. En ése entonces, estábamos publicando libros junto con Simón Pedroza, Javier Payeras, Alejandro Marré entre otros. El proyecto no era tan ambicioso cómo se pensaba; al contrario, era un proyecto quizás quimérico y delirante (bizarro, en el mejor de los casos). Pero lo curioso es que sin querer se publicaron (hmm, a ver...) alrededor de 10 libros y unos 10 Pasteles de Moscas, que eran una especie de antologías tipo fanzine de bajo presupuesto diseñadas al corta-y-pega en papel kraft tamaño carta donde nos publicábamos a todos y quedaban bien chingonas. En el proyecto publiqué dos libros, Pedroza y Payeras tres o cuatro quizás. De los libros que recuerdo, "El Ahorcado" de Simón es mi favorito. También me gustan "Ausencia es ¼ vacío" y "Artificial", ambos de Javier. Por otro lado, hay un libro –me gusta decir “de colección”– que salió con portadas especiales y únicas (por mi parte, pinté unas 20). El libro se titula: "Terrorismo Moral y Ético (pastel tres moscas)" de Pedroza, Marré y Payeras. Cada portada del libro tiene la silueta de un arma 9mm y todas las portadas (200 libros) son distintas y están pintadas por pintores-artistas del momento, entre ellos José Osorio, Josué Eleázar, Giovanni Pinzón y otros. Conseguir uno de ésos libros, es todo un lujo. Yo tengo en mi caja de ésos años, cuidadosamente guardados unos 5, para quien quiera verlos. Hay por allí otro detalle de la época que no puedo dejar pasar. Y es que en esos años eran solamente dos las editoriales –digamos under– que se dedicaban a publicar literatura insurrecta o subversiva, una era EMB y la otra Editorial X. Este proyectil, me gustaba, sobre todo por Estuardo Prado (fundador, editor y director de la X). En EMB publicábamos poesía y en X, narrativa. De ésos años recuerdo dos libros clave para la historia de la literatura guatemalteca. Uno, "Vicio-nes del Exceso" de Estuardo, narrado con degenere y pulcritud literaria, grotesca y docta escuela pues. El otro, es "Este Cuerpo Aquí (Antidiario)" de Maurice Echeverría, libro que invoca el día a día de un personaje reflejo de toda una generación. Dos libros visceralmente recomendables que contienen droga, cotidiano, vacío, absurdo, reflexión, excesos, realidad. Luego Editorial X sacó una serie de libritos muy buenos, pero la magia del under se difuminó con la llegada de premios y otros intereses que prefiero tocar en otro post. Luego vino la publicidad, los viajes, el exceso, la responsabilidad. Y en tal caso, es que desde entonces no he publicado un libro personal de tiraje mayor a treinta copias (siempre he mantenido la estética de sacar pequeños libritos de tirajes menores y regalarlos a amigos, novias y amantes). Nunca he buscado algún contrato editorial, ni mucho menos me he movido en el 'conecte' de los intereses. Anyway, el último libro de tiraje más o menos mayor que publiqué fue "Diafragma Numérico", un poemita largo siempre con EMB; y parece que no quedan copias por ninguna parte (excepto en mi librera y en la de algunos amigos). Para todo esto, han salido publicaciones antológicas –impresas y en la web– y me he mantenido al margen de muchas actividades literarias, pero siempre observando y metiendo mano cómo el viejo Ortega y Gasset. La creación, en todo caso, nunca se detiene. Hay tela de donde cortar versos, hay caldo de donde sacar carne bien cotizada y bien sazonada al gusto del cliente.


Y ahora, después de 10 años, estoy embarcado en un proyecto editorial que pronto verá luz con uno de mis libros -el primero de una antología cuádruple personal-. El proyecto, no es la secuela de toda ésa rebeldía de hace una década (¡puta, ya es una década!). Al contrario, es una fiesta armada con suficientes municiones para soportar la batalla en la trinchera espectadora, o en el campo abierto de las literaturas nacionales y campales. ¡¡¡La partie doit continuer!!! ¡¡¿O no?!!