Hoy no diré más nada, excepto trataré de transcribir la nostalgia de un miércoles y sus conspiraciones en enero. Largas caminatas, viento en constante -y disperso-.
Hoy no intentaré llenar los vacíos de mi prosa; ni mucho menos hilvanar toda tendencia periodística en mis fallidas y precoces interpretaciones.
Hoy no me cito a mí mismo, ni mucho menos a un extemporáneo. Pero sí veo pasar las nubes como Baudelaire y me atrevo a mencionar, acaso, una de las canciones más completas de Andrés Calamaro:
"La culpa es un invento muy poco generoso, y el tiempo tremendo invento sabandija"
Hoy no diré más nada, lo sé muy bien. Excepto que la tarde afuera, está, de mil posibilidades a la intemperie... Límpida y dispuesta.
Hoy no intentaré llenar los vacíos de mi prosa; ni mucho menos hilvanar toda tendencia periodística en mis fallidas y precoces interpretaciones.
Hoy no me cito a mí mismo, ni mucho menos a un extemporáneo. Pero sí veo pasar las nubes como Baudelaire y me atrevo a mencionar, acaso, una de las canciones más completas de Andrés Calamaro:
"La culpa es un invento muy poco generoso, y el tiempo tremendo invento sabandija"
Hoy no diré más nada, lo sé muy bien. Excepto que la tarde afuera, está, de mil posibilidades a la intemperie... Límpida y dispuesta.