domingo, 29 de enero de 2006

Salú, maestro

Quiero mirarte, dejar encendida la luz.
Quiero no estar seguro de mis cegueras,
encender las esquinas de esta cama cosntante.

Porque demasiado sabemos de las cosas tristes
y de las cosas mudas, y demasiado
de los ojos, los apenas-ojos de los cadáveres rosados.

Hoy es preferible dejar encendida la luz.
Oigamos el rumor de la ventana.



De Encierro Y Divagacion En 3 Espacios, Maurice Echeverría
(Premio Centroamericano de Novela Mario Monteforte Toledo 2005)